lunes, 25 de mayo de 2015

Compensatorio Prueba de fecha 22/05

Aeróstatos
Eduardo Wolovelsky, en Revista Nautilus Nº 5(www.proyectonautilus.com.ar). 

Mitad hombre y mitad toro, el Minotauro era un ser temible(*). Debido a la amenaza que representaba, el rey Minos de Creta le encargó al célebre inventor y arquitecto Dédalo que construyera un laberinto donde encerrar a la monstruosa criatura (*). Para apaciguar la furia del prisionero y, al mismo tiempo, vengarse de los atenienses que habían matado a su hijo Angrogeo, Minos le ofrecía en sacrificio siete doncellas y siete jóvenes de la ciudad de Atenas.
Teseo, héroe ateniense, con la intención de matar al Minotauro, se ofreció como voluntario para ser sacrificado en el interior del laberinto. Cuando el joven llegó a Creta, la princesa Ariadna, hija del rey Minos, se enamoró del héroe y le entregó un ovillo de hilo que le fuera obsequiado por Dédalo (*). Atando el extremo del hilo en la entrada del laberinto, Teseo podría encontrar la salida luego de matar al Minotauro y liberar así a la ciudad de Atenas de tan doloroso tributo.
Muerto el Minotauro, Teseo abandonó la isla de Creta junto con la princesa Ariadna.
Minos, enojado con Dédalo por considerarlo cómplice de su hija, lo encierra en el laberinto junto a su hijo Ícaro. Habiendo olvidado los intrincados caminos de su propia obra, Dédalo sabe que la única forma de escapar de su prisión es por el aire, dado que el laberinto era una construcción a cielo abierto (*). Dédalo, entonces, construye con cera y plumas dos pares de alas y le advierte a Ícaro que no vuele demasiado alto para que el calor del sol no derrita la cera y que tampoco lo haga demasiado bajo para que el agua del mar no moje las plumas.
Emocionado por la libertad del vuelo, Ícaro desoye la advertencia de su padre y asciende hasta que el sol derrite la cera. Ícaro cae a las aguas del mar y muere. Dédalo logra llegar a la isla de Sicilia y se instala en la corte del rey Cócalo.


 Actividades 
1.- Luego de leer este mito, agregar en las zonas que se indican con (*) asterisco, aspectos descriptivos para ampliar detalles de esta historia.
2.- Identificar a los personajes. ¿Cuántas historias se cuentan? Divídelas desde el conflicto, los personajes y los finales que se ofrecen.
3.- ¿Cuáles son los mensajes o lecciones que quieren transmitir?
4.- Extrae los verbos subrayados en ambas historias (La de Teseo y la Minos) Coloca los accidentes gramaticales a esos verbos conjugados y luego determina ¿por qué están escritos en distintos tiempos verbales? 

domingo, 17 de mayo de 2015

Un cuento más...y una leyenda!!!!

Aquí les dejo otro cuento- Este es un relato tradicional también como el mito pero que tiene elementos distintivos. El segundo se  conoce como leyenda...Espero les gusten, los comentamos en clases....

Escuela de Hechicería /  Anónimo
Había una vez, en algún lugar del mundo (nadie sabe dónde), una escuela que se llamaba la Escuela Negra. Allí los alumnos aprendían hechicería y toda clase de artes antiguas. Donde fuera que estuviese la escuela, se hallaba en un sitio subterráneo; y era una inmensa sala que, como no tenía ninguna ventana, siempre estaba a oscuras. Tampoco había maestro alguno, sino que todo se aprendía en libros cuyas letras de fuego podían leerse en la oscuridad. A los alumnos nunca se los dejaba salir al aire libre o ver la luz del día durante el tiempo que permanecían allí, que era de cinco a siete años. Al cabo de este periodo, habrían adquirido un conocimiento completo y perfecto de las ciencias que debían aprender. Todos los días, una mano gris y velluda surgía a través de la pared con la comida para los estudiantes y, cuando estos terminaban de comer y de beber, se llevaba de vuelta los cuencos y las fuentes.
Pero una de las reglas del lugar era que su dueño se apoderaba, cada año, del alumno que abandonaba la escuela en último lugar. Considerando que era bien sabido por todos que el amo era el diablo en persona, pueden imaginarse el tumulto que se armaba cada fin de temporada; todo el mundo hacía lo posible por no quedar rezagado.
Sucedió una vez que fueron a la escuela tres islandeses; se llamaban Semundur el Sabio, Kálfur  Arnason y Haldán Eldjársson; y como los tres llegaron al mismo tiempo, supuestamente los tres partirían, también, al mismo tiempo. Semundur afirmó que sería gustosamente el último en irse, lo que dejó a los otros muy aliviados. Se echó entonces encima un capote holgado, pero no pasó sus brazos por las mangas ni lo abrochó.
Una escalera conducía desde la escuela al mundo exterior y, cuando Semundur estaba por ascender por ella, el diablo lo agarró y le dijo:
--¡Tú eres mío!
Pero Semundur se desembarazó rápidamente de su capote y escapó a toda velocidad, dejando al diablo con la prenda vacía. En el momento mismo en que salía al mundo exterior, la pesada puerta de hierro se cerró de golpe a sus espaldas y lastimó a Semundur en los talones. El joven dijo entonces: “Me venía pisando los talones”, palabras que desde entonces se convirtieron en un dicho.
Así, Semundur se las ingenió para escapar de la Escuela Negra sano y salvo, junto con sus compañeros.
La Leyenda de Chaltén
El pueblo Chónek creado por Kóoche (Dios), vivían en estado salvaje, luchando mano a mano con las fieras, para procurarse el sustento y abrigándose en grutas. Un niño excepcional llamado Elelal, que no era de su raza, es salvado de las garras de un gigante merced a la oportuna intervención del cisne (kóokn) quien en vuelo sin etapas, lo traslada de la isla donde había nacido, a las yermas tierras patagónicas, depositándolo en la cima de la más hermosa e imponente cumbre patagónica: el Chálten, el Fitz Roy de la geografía actual. Pasa allí tres días, alimentado y protegido solícitamente por las aves que le habían acompañado.
Librado luego de sus popios medios, tiene que luchar con tres enemigos que le acechaban para quitarle la vida: el frío, la nieve y el viento. Se defiende del primero golpeando unos pedernales y produciendo el fuego; del segundo, fabricando el toldo (kaú) con pieles de guanaco, y del tercero, utilizando la capa (kai). Inventos que transmite a sus amigos, los aónikenk, junto con el arco y la flecha para defenderse de las fieras. Es por eso que el Chalten o Fitz Roy era el cerro sagrado de los aborígenes sureños.
El mismo protagonista tesmóforo, después de haber vivido mucho tiempo, entre sus amigos, dándoles sabias normas de vida y de moral, fue a buscar a la hija del Sol, el lucero matinal (Kawó), conducido en forma de pajarillo por su propia madre, que se había metamorfoseado en un espléndido cisne de poderosas alas.
Después de vencer tres sutiles ardides tendidos astutamente por el Sol, logró la mano de la doncella al colocarle el anillo misterioso que estaba oculto en lo más recóndito de una profunda caverna.
Allá arriba, al lado del Sol, espera a sus amigos, los aónikenk, y les ofrece caza abundante en los mundos del espacio. Como prueba de su buena voluntad, dejó impreso en el cielo el rastro del avestruz, choiols, la constelación y la Cruz del Sur, para indicarles el camino que habían de seguir. Por eso, el patagónico mira con gusto el cielo estrellado.
Allá están sus compañeros divirtiéndose con perpetuas cacerías, como lo demuestran esas nubes blancuzcas, las nubes de Magallanes, que es el polvo que levantan las manadas de guanacos al disparar.

Y lo dice también ese gran callejón blanquecino, La Vía Láctea, por donde pasan a la carrera los cazadores, sembrándolo con  las plumas de los avestruces que han cazado. 

miércoles, 6 de mayo de 2015

Lecturas - Mitos

El Mito de Ariadna

Ariadna es la hija del rey Minos y Pasifae de Creta. Su padre tenía en un laberinto al minotauro, a quien había que alimentar con gente ateniense cada nueve años.
La tercera vez que los atenienses debían pagar su tributo, Teseo, -hijo de Egeo, el rey de Atenas- se ofrece a ir y matar al minotauro. El problema era que el minotauro vivía en un laberinto del que no se podía escapar.
La hija de Minos, Ariadna vio a Teseo y se enamoró de él, por lo que decidió ayudarlo con la condición de que se casara con ella y se la llevara lejos de su temible padre.
Teseo aceptó, y así fue como Ariadna le regaló un ovillo para que una vez en el laberinto, fuera desenrrollándolo y pudiera servirle de guía al regreso e indicarle el camino de regreso.
Cuando Minos supo que Teseo había matado al minotauro montó en cólera por lo que Teseo tuvo que apresurarse en la huída en la que lo acompañó Ariadna. Pero ella nunca llegó a ver la tierra de Teseo, Atenas, pues en una escala que él hizo en la isla de Naxos, la abandonó dormida en la orilla.
Las versiones de esta traición varían mucho y se han hecho un sinnúmero de hipótesis. Se ha dicho que Teseo dejó a Ariadna en la playa porque estaba enamorado de otra mujer, también que fue por orden de los dioses, o sino que mientras ella se encontraba en la playa recuperándose de un mareo, él regresó al barco, y este sarpó impulsado por un misterioso viento.
Pero, Ariadna no se amilanó mucho y olvidó sus penas de amor con el dios Dionisio, quien se había enamorado profundamente de ella. Se casó con ella y la llevó al Olimpo. Como regalo de bodas le dio una diadema de oro que hizo Hefesto y que luego se convirtió en constelación.
Sus hijos con Dionisio fueron Toante, Estásfilo, Enopión y Pepareto.
Su muerte es objeto de varias versiones pues hay quienes dicen que Artemisa la mató, cumpliendo órdenes de Dionisio. Pero también hay quienes opinan que ella murió en la isla de Naxos, donde Teseo la había abandonado cuando ella dio a luz.

Mito - Marco Teórico

EL MITO
El mito es un relato tradicional donde personaje extraordinarios realizan acciones sobrenaturales. En un principio, los mitos fueron transmitidos oralmente de generación en generación, y luego, los recopiladores hicieron las versiones escritas que llegaron hasta nuestros días.
En los mitos, la narración se inscribe en épocas lejanas e imprecisas, en las que los mortales interactúan con las divinidades en un período anterior al tiempo histórico. El espacio en el que habitan los dioses se diferencia del que ocupan los mortales o los muertos, pero muchas veces los personajes suelen desplazarse de un lugar a otro.
El mito es esencialmente un relato de carácter religioso y trata de explicar el origen del hombre, la creación del mundo y las leyes de la naturaleza. Existen diferentes clasificaciones de los mitos. Algunos, teniendo en cuenta los personajes que protagonizan las historias, los dividen en: mitos divinos, protagonizados por dioses, y mitos heroicos, protagonizados por héroes. Otros investigadores, en cambio, consideran que los mitos tratan sobre la naturaleza y, por ende, los dividen según los temas en mitos del sol, del cielo, del mar, del fuego, etc.
Los mitos más conocidos son los que pertenecen a la cultura griega y a la romana. La colección de mitos pertenecientes a un pueblo determinado se llama “mitología”.
Los personajes
Los personajes principales de los mitos son los dioses y los héroes. Los dioses se caracterizan por ser inmortales y poderosos. El dios principal de la mitología griega es Zeus, llamado Júpiter en la mitología romana. Los sentimientos y los comportamientos de los dioses se parecen mucho a los de los humanos: sienten celos, envidia, y algunos son muy vengativos, como Juno. Se relacionan a diario con los mortales a quienes favorecen o perjudican de acuerdo con sus preferencias, sin importar si es justo o no. Cada uno de los dioses gobierna sobre un aspecto de la realidad (la guerra, la fertilidad, el mar).
Los héroes, por su parte, son hombres extraordinarios que sobresalen por alguna característica que los diferencia de los demás mortales.
Otros personajes mitológicos son las divinidades menores, como las ninfas, los seres fabulosos (mitad hombre, mitad animal) y los monstruos o animales feroces.
La figura del héroe
Muchos de los protagonistas de los mitos son héroes. Los más famosos son Hércules, Aquiles y Odiseo.
Lo que convierte a un personaje en héroe es, por un lado, sus actos, y por otro, su personalidad. Sus acciones son hazañas que no puede realizar cualquier mortal. Los mitos relatan una serie de pruebas que deben sortear los héroes para demostrar su superioridad; su recompensa será lograr la gloria y la fama.
Desde el punto de vista de su personalidad, el héroe mitológico posee varias virtudes que guían su conducta y responden a la escala de valores del tipo de sociedad de la cual el héroe se propone como modelo.
LA TRAMA NARRATIVA
Todos los mitos son narraciones. Los textos narrativos se caracterizan por organizarse alrededor de una estructura básica, formada por una serie de categorías fijas: el marco: que representa el lugar y el tiempo en que suceden los hechos y,  el suceso que es la acción que lleva a cabo el protagonista y el resto de los personajes. Estos dos elementos componen la trama narrativa. 
 En el caso de los mitos, el tiempo es impreciso y sólo está determinado por los actos o los sucesos. Por ejemplo, Hércules nace, crece y, tiempo después, se casa con una doncella.
El suceso está formado por la complicación y la resolución. La complicación modifica el estado precedente y desencadena el relato. Es la parte más interesante del texto, porque permite que la narración avance y se llegue al momento cumbre o clímax, cuando se pone en crisis la situación inicial. La resolución es el desenlace del conflicto y puede ser favorable o desfavorable para los personajes.
La suma del marco y del suceso forma el episodio. En un texto narrativo, podemos encontrar uno o más episodios.

Bienvenidos!!!!

Estimados alumnos de Primer Año....tal lo prometido, aquí está el Blog que nos mantendrá activos durante todo el ciclo escolar. Espero lo puedan utilizar para mejorar el contacto con la asignatura y lograr comunicarnos en otra instancia, fuera de la clase áulica....Nos vemos...